30 de julio de 2022

Todos hemos visto, o hemos oído hablar de la serie Juego de tronos. Una serie en la que muchas familias, con intereses diferentes y aspiraciones dispares se enfrentaban o aliaban en función de las situaciones que se iban produciendo. Incluso en algunos momentos los enemigos se juntaban para enfrentarse a una amenaza común. Y, como en toda guerra (ojo que viene spoiler), al final todos pierden. Unos mucho o muchísimo y otros… todo.

Esta serie siempre ha sido un reflejo de lo que es el mundo y nuestra sociedad. Quizá por eso triunfó tanto. Y hay una cosa que une la vida real a esta serie: “Se acerca el invierno”

En la guerra con Rusia hay muchos aspectos que recuerdan a esta serie. La condenamos por invadir Ucrania, pero no hablamos de lo que hicimos mal antes de esa invasión para evitar ese conflicto. Criticamos con dureza a Rusia, pero no nos atrevemos a entrar en guerra con ella. Ayudamos a Ucrania, pero con cautela para no enfadar al gigante ruso. Imponemos sanciones económicas poco a poco que molestan, pero no asfixian a la superpotencia energética. Es obvio que Europa no quiere entrar en una guerra armada con el país más extenso del mundo porque eso sería catastrófico a todos los niveles. El sentido común de la OTAN dicta estas normas de presión, pero sin agresión armada directa. Es cuestión de cordura. Pero económicamente la guerra se lidia, en otros términos. En términos denominados GAS. Así de sencillo. NO hay más ni menos.

Cuando uno va a una negociación debe intentar tener muy claras 4 cosas:

1. ¿Qué resultado deseo obtener?
2. ¿En qué puedo ceder y en qué no?
3. ¿Cuál es la posición (geoestratégica en este caso) con la que llego a esa negociación?
4. ¿Qué bazas negociadoras tengo para alcanzar el éxito?

Las 2 últimas son las que te dan la posición de mayor o menos fuerza y te permitirán alcanzar o no el éxito. Y eso es lo que está preparando Rusia en este momento.

Me preguntan por qué España compró a Rusia el 24% del gas en junio si normalmente no compra más de un 5%. Me preguntan por qué Rusia cierra el Nord Stream 1 y luego abre al 40% y luego sólo al 20%. Me cuestionan por qué no lo cierra del todo y le da en la boca a Europa. Y todo está ligado a las negociaciones que vienen por delante.

Rusia no puede dejar de suministrar a Europa su gas porque supone el 78% de sus ventas. Y es uno de sus principales ingresos. Sus opciones son vender a otros mercados, pero por tubo es algo complejo, costoso y lento porque requiere de infraestructuras. Licuarlo y vender lo por barco es viable. Pero un mercado nuevo no se abre en 4 días. Rusia sabe que Europa depende su gas para seguir funcionando. Esa es la baza principal. Otro debate es ¿cómo ha llegado Europa a este punto? Pero ya lo hemos comentado en otros artículos.

Europa no tiene infraestructura de regasificación para comprar gas licuado en sustitución del ruso que llega por tubo. NO tiene capacidad de almacenamiento suficiente (el 30% de la capacidad del continente europeo está en España) Comprar gas licuado a EEUU, por ejemplo, implicaría montar una infraestructura de regasificación sin precedentes, costosa y muy lenta (2 años siendo muy optimistas) Puede comprar barcos que transporte gas licuado con capacidad de regasificar en puerto pero de nuevo coste y plazo inasumibles.

Resumiendo, que no podemos ponernos muy chulos con Rusia y Rusia no puede cerrar el grifo del todo sin ayuda económica para compensar. Y aquí es donde la cosa se complica. EL papel de China en este aspecto va a ser vital. SI china ayuda a Rusia Europa se asfixiará en una inflación desbocada y una falta absoluta de competitividad. Pero china también depende de la EU para sus ventas. Le interesa debilitar a Europa, pero sin enfadarla del todo. Rusia ha cerrado el Nord Stream 1 por mantenimiento y luego, con excusas poco sólidas, ha abierto parcialmente (primero 40% luego 20%) y esto es porque no quiere que Europa llene sus almacenes de cara al invierno. Y si Europa no llena sus almacenes se encontrará en una posición muy débil para negociar llegado el momento. Esa estrategia es la que sigue Rusia que sabe que el invierno se acerca. Y mientras la otra gran casa del juego, EE.UU. apoya, como es lógico a sus aliados. Y en este apoyo ofrece su GAS a Europa para pelear contra la dependencia rusa. Y en apenas 2 años se ha convertido en el primer exportador de gas del mundo. Un negocio “nuevo” que ha podido llevar a cabo gracias a la tecnología del fracking. SI Europa refuerza su capacidad de regasificación sería un aliado perfecto y el país americano tendría, de nuevo, una hegemonía mundial en un sector vital. Socio viable y fiable. Negocio redondo. Mientras Rusia y China se alejan de la orbita comercial de Europa y EE. UU. gana su cuota. Al final suena a lo que vaticinó Trump. NO seré yo quien defienda al expresidente, pero muchas de las cosas que decía (qué pena que no usara un tono diferente cada vez que lo hacía) resultan ahora ciertas.

Europa reabre plantas de carbón dando pasos atrás en su estrategia de descarbonización a la vez que abre otros debates que no sirven de nada como el de la energía nuclear. La energía atómica, sin ánimo de posicionarme a favor o en contra, no es la solución para esta situación porque instalarla lleva entre 3 y 4 lustros. Comprar gas licuado y regasificarlo es la opción más viable pero el 34% de la capacidad de regasificación está en España y no hay tubo para evacuarlo a Europa (porque en 2019 se decidió no hacer el MIDCAT por los pirineos) Por tanto Europa tendría que ponerse a instalar. Coste y plazo. Y el inverno se acerca.

Se puede almacenar en España para luego enviar por buque a Europa. Esta es la mejor baza de Europa. Quizá por eso la UE ha presionado a Argelia para que deje de estrangular a España. Por eso la EU no le ha dicho nada a España por comprar el 24% de s gas en junio a Rusia pese a llevar meses por debajo del 5%. Y Rusia le ha vendido gas a España porque ayuda a minimizar el impacto económico de las limitaciones de sus ventas a Europa en su intento de evitar su almacenamiento sabiendo que ese gas para que llegue a Europa desde España implica un proceso es largo y lento. Y además Las reservas de España pueden llenarse con gas ruso o con el norteamericano, Qatarí o cualquiera que lo mande licuado. España, España, España. SI no aprovechamos esta situación de poder derivada de nuestra posición de almacenamiento y regasificación es para hacernos mirar en manos de quién estamos.

Se acerca el invierno. Y el gas es necesario para tener calefacción, electricidad y mantener el nivel competitivo de la industria europea. Y las decisiones actuales de Rusia, de Europa, de España, de China y del resto de países involucrados están orientados a llegar a ese punto de negociación en el momento más extremo en la mejor posición. Y la verdad es que Europa lo tiene complicado. Habrá que ver cómo lo resuelve y especialmente cuánto nos cuesta. De momento el precio de la electricidad se va a disparar cerca de los 1.000€/MWh. Veremos si podemos soportarlo. Como dijo Ramsay Bolton “Si crees que esto tendrá un final feliz, es que no has estado prestando atención”

“WINTER IN COMMING”

Ned Stark